Richard Gonzales
Hay una campaña sostenida por parte de la prensa de la ultraderecha chilena, con el fin de demonizar al migrante, al igual que el estado genocida de este país. Hacen ver como que los grandes problemas económicos, políticos, sociales, culturales los viene generando los migrantes. En el colectivo popular, comienzan a rebrotar el odio a sus hermanos obreros, y como que la masa obrera, campesina, de la pequeña burguesía de este país, vivía en óptimas condiciones económicas, con una altísima calidad de vida, y como que no existía esa contradicción de clases, pobres explotados y oprimidos contra los explotadores, por tanto, vienen a alterar esta llamada “paz y democracia” y, ¡qué paz y democracia! Y el demonio es los migrantes.
Vayamos a los datos del mismo INE: tasa de desocupación 8,4% (noviembre-enero 2024), tasa de desempleo de mujeres en el mismo periodo 8,8%, tasa de ocupación informal (trabajo precario) 27,6%, de un 20,3% en 2020 a un 16,9% en 2022, porcentaje que ubica a 3.313.549 personas en pobreza multidimensional. Pobreza extrema un 5,2% hasta el 2023.
La última cifra oficial indica que en el año 2021 residían en Chile 1.482.390 personas extranjeras, un aumento de un 90% respecto de 2017 (INE 2022). De este total, un 30% proviene de Venezuela, seguido de Perú y Haití, con un 17% y 12%, respectivamente. De este porcentaje ¿cuántos son delincuentes? Que porcentaje de la población migrante es delincuente o lumpen, según gendarmería, hasta el 2021 se dice que los lumpenes nacionales imputados es de 33%, mientras los extranjeros son de 63%, de las cuales, ¿a cuanto equivale poblacionalmente en comparación con la totalidad de la población chilena?, no lo dicen. Si comparamos con la pobreza y extrema pobreza, obvio es abismal, pero antojadizamente y bajo una campaña sostenida una vez mas se demoniza la pobreza, pero veamos, cuantos delincuentes de saco y corbata esta en la cárcel, cuantos dueños de corporaciones explotadores de la masa migrante o no migrante esta en la cárcel por hacerlos vivir en la miseria. Cuantos coludidos, o cuantos quienes se aprovechan de la necesidad y desesperación de la vida migrante. La característica de este pueblo siempre ha sido su espíritu solidario, otra cosa es que una minoría de minorías incitadas por el odio, hasta las campañas de fascistización calan en su mente siendo pueblo, la cual debemos desenmascarar.
Le corresponde al Estado opresor, capitalista, generar trabajo pleno ¿lo harán? ¡rotundamente que no!, dado que necesitan un ejército de miseria, un ejército de desocupados o en condiciones de trabajo precario, para no pagarles sus derechos o el valor de su fuerza de trabajo acorde al costo de vida, la razón es, abaratar los costos de producción, el capitalista sacrifica a los pobres para mantener su ganancia, la plusvalía que genera la masa trabajadora, obvio, para desorientar a una masa inculta, demonizan al migrante, para desviar al responsable del estado de cosas que vive la masa en general.
La idea o plan del capitalismo, de los capitalistas y sus burócratas sostenedores es, generar un peligro, un demonio a combatir, un enemigo interno, como ya lo venían haciendo con el pueblo mapuche que exige autodeterminación y soberanía, que ahora lo extiende a los migrantes, luego lo harán a todos los luchadores sociales, luego al pueblo en general, es parte de la fascistización de las sociedades, que ha entrado en este procesos de crisis general del sistema a una mayor reaccionarizacion de toda la sociedad.
Paralelamente combaten bajo campañas siniestras y en protección del gran capital a los mal llamados “vendedores ambulantes”, mientras no generan trabajo pleno con derechos plenos, con salarios acorde a la canasta familiar y costo de vida, persiguen a quienes subsisten de alguna manera frente a la desocupación, entonces ¿Qué pretenden? Que esa parte de las masas o bien se mueran de hambre o en su desesperación recurran a la lumpeneria.
Entonces ¿Quién es responsable del estado de cosas en esta República? ¡las clases dominantes!
La misma lógica represiva sigue en los “desalojos” a los migrantes en los barrios y barriadas creadas, llamados “tomas”. La mercantilización de los derechos como la salud, educación, la jubilación, tan igual es el derecho de la vivienda, hoy se constituye en delito. Esos llamados “subsidios de vivienda” ¿por qué no se incluyen en subsidios para la compra de un terreno, y no direccionados para la compra de esos guetos que son los edificios, que no es tener calidad de vida, dado que, en 40, 50 metros cuadrados, con precios extra exorbitantes, nadie tiene calidad de vida, no hay espacios de recreación, ocio, son verdaderos guetos para adquirir obesidad y todas las enfermedades cardiovasculares e hipertensión, dado la poca movilidad del sujeto. Están diseñados para la ganancia, lucro incesante del gran capital en ese maldito afán de acumular y acumular.
Los obreros y trabajadores de este país o de otros países son obreros donde estén, sufren las mismas bestialidades del capital y de un estado opresor y explotador, por tanto, unir al pueblo, organizarlo es tarea del camino del pueblo. La esclavitud moderna, de los tiempos del gran capital, de las corporaciones, es tan igual que aquí o en la Conchinchina, para la problemática y perspectiva de los esclavos modernos de esta civilización.
Hay que desenmascarar ese plan siniestro, porque las clases dominantes juegan en ese plan de demonización del pueblo, de sus luchas, están actuando con anticipación contra el “enemigo a futuro “ la cual sinceraba el expresidente Piñera nítidamente, es decir, es una “guerra” como lo dijera, “ preventiva” y eso es derecho penal del enemigo, es cosificar al sujeto del pueblo, es deshumanizar, para luego liquidarlo bajo acción “legitima y legitimadora de la llamada “opinión publica”.
Chile 25 de marzo del 2024
